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Apuntes del Profesor Luis Carrasco-Garrido

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riesgos

¿Qué hace pensar que si Nueva York no resistió a los efectos del cambio climático, lo harán las ciudades Chilenas?

Ing. Luis Carrasco Garrido Académico Dpto. de Prevención de Riesgo y Medio Ambiente UTEM Experto en Gestión del Riesgo y Educación luis.carrasco@utem.cl @carrascoluis
Un evento meteorológico histórico con lluvias récord en toda la ciudad de Nueva York, inundaciones nunca vistas y condiciones de extremo peligro en las carreteras. En el Central Park de Manhattan, cayeron 3,15 pulgadas (80 mm) de lluvia en una hora y se registraron hasta 5,2 pulgadas (132 mm) a las 11 p.m., lo que informaba el Centro de Predicción Meteorológica de EE. UU. Las advertencias de emergencia por inundaciones repentinas desde Delaware hasta Massachusetts eran cada vez más periódicas  y preocupantes. El New York Post informaba que cuatro personas habían muerto en Queens y Brooklyn después de quedar atrapadas en sus sótanos. El diluvio se produjo dos semanas después de que la tormenta tropical Henri arrojara una cantidad récord de lluvia en la ciudad de Nueva York, lo que viene a completar una serie de eventos climáticos extremos registrados en todo el mundo atribuibles al cambio climático. Los incendios forestales masivos en California y el oeste de Canadá y Siberia, enviando humo sobre el Polo Norte, un hecho nunca antes visto. El huracán Ida impactó Louisiana con vientos récord de 150 millas por hora (241 kilómetros), dejando a más de 1 millón de clientes en todo el sur, incluida Nueva Orleans, sin energía eléctrica y matando al menos a cinco personas. El colapso del edificio Champlain Towers en Miami en julio tiene un fuerte componente de inundación de los sectores costeros y cambio en la estabilidad del terreno.

¿Qué tan cerca está Chile de eso?, un país con una gran cantidad de riesgos que podrían producir catástrofes, con carencias de infraestructura y diseño. Un país muy sísmico pero que el cambio climático aporta hoy con datos y condiciones que en 100 años no habíamos visto, sectores costeros afectados por el nivel del mar, marejadas, cuadros meteorológicos agudos, falta de agua, aumentos de temperatura, avance del desierto, etc. Lo que va conformando situaciones únicas y extremas, que finalmente pueden ocasionar y propiciar emergencias que se pueden convertir en desastres, como sucede en otras realidades conocidas mundialmente  que han hecho que estructuras muy robustas no respondan a los cálculos para los cuales fueron hechos, y termite por afectar a las personas y destruir las edificaciones. Los materiales no resistieron, las obras no sirvieron, no soportaron el impacto, etc.

¿El metro inundado? Cortes masivos de energía, Los captadores de agua reventados, calles convertidas en cauces de rio, edificios antiguos que resistieron muchos años deteriorados de tal forma que hoy no son seguros, población ubicada en sectores de riesgo, etc.

Algunas reminiscencias ya vistas en nuestro país,   aluviones, desbordes de ríos, nevazones, canales insuficientes, sequía, etc. Si Nueva York no resistió, ¿tenemos la seguridad que Antofagasta, La Serena, Santiago, Valparaíso, Concepción, Valdivia, Puerto Montt y Punta Arenas lo harán? Difícil poder responder, pero todos estos son avisos de mega-ciudades altamente tecnificadas y bien diseñadas que no han resistido, lo que da un aviso preventivo para reforzar nuestras capacidades de respuesta y mejorar nuestras condiciones frente a las vulnerabilidades, antes que la amenaza se haga presente cobrando vidas y bienes.

Fotos referenciales

Nota: este artículo ha sido publicado de forma parcial o total por https://www.diariosustentable.com/2021/09/si-nueva-york-no-resistio-los-efectos-del-cambio-climatico-lo-haran-las-ciudades-chilenas/

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Proyecciones climáticas establecen más de 100 mm de agua para la próxima semana, lo que sería una buena noticia en medio de un año marcado por una megasequía y escasez hídrica. La capital a la fecha acumula 78,1 mm de precipitaciones, muy por debajo del promedio anual de 341,8 mm.

El pronóstico (por ahora solo un proyección), señala que podría llover en la zona centro-sur, incluida la Región Metropolitana, desde el lunes hasta el viernes. En un año marcado por una megasequía y escasez hídrica, la capital a la fecha acumula 78,1 mm de precipitaciones, muy por debajo del promedio anual de 341,8 mm.

Si bien aún no se puede determinar a ciencia cierta cuánta lluvia caerá, algunos modelos estiman más de 100 mm de agua en Santiago y la zona central. Esto sumado a la situación que afecta al extremo sur de Chile, más precisamente en Punta Arenas, donde se registran vientos que han superado los 100 km/h.

¿Qué dicen los expertos al respecto? ¿Efectivamente lloverá durante cinco días en medio de una megasequía? ¿Qué fenómeno generaría estas precipitaciones? ¿Tienen algún vínculo las precipitaciones y las ráfagas de viento?

Luis Salazar, meteorólogo de la Dirección Meteorológica de Chile (DMC), señala que no hay que olvidar en ningún momento que estamos en invierno, “y lo anómalo ha sido la ausencia de sistemas frontales durante esta estación. La lluvia ha estado inhibida por la fuerte presencia del anticiclón subtropical. Advertimos que los índices planetarios, tales como la oscilación antártica, se movieron a un cuadrante que permiten que los sistemas frontales ingresen a la zona central. A partir del domingo en la noche ingresarán a la región de Aysén y Los Lagos, y se irán desplazando durante el lunes hacia La Araucanía, BioBío, Ñuble y el Maule”.

Salazar explica que, salvo que no existan cambios, ya que se trata de un pronóstico, “el jueves llegaría el sistema frontal con precipitaciones a la Región Metropolitana. Serían las precipitaciones más importantes en lo que va del invierno. Antes del jueves arribaría a la Región de O´Higgins. Esta inestabilidad podría afectar con chubascos en declinación hasta la mañana del viernes. En la cordillera y alta cordillera será diferente, ya que esperamos nevadas desde el lunes al sábado”.

Luis Carrasco, académico de la Escuela de Prevención de Riesgos y Medioambiente de la Universidad Tecnológica Metropolitana, establece que este tipo de sistemas frontales suelen presentar lluvias más constantes. “A pesar de los informes de sequías producto del cambio climático, lo importante es que el sistema frontal va a permitir que la alta presión ceda e ingresen otros sistemas frontales”.

A pesar de lo que suceda, Salazar cree que no nos acercaremos al promedio anual de precipitaciones, “pienso que no, de ninguna manera”, señala enfático.

Fotos : referenciales 

Nota: Este articulo fue publicado en la Tercera por Carlos Montes donde se entrevista al Ing. Luis Carrasco Académico de la UTEM publicado el 13.08.21 https://www.latercera.com/que-pasa/noticia/pronostican-intensas-jornadas-de-precipitaciones-en-la-region-metropolitana/IKJWB3ZHFVAJTAMGFYINX7LXCI/

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El planeta se derrite: EE.UU., Canadá, Italia, Grecia, Groenlandia y Turquía sufren las consecuencias del cambio climático en el hemisferio norte

Europa , Asia y América del Norte está siendo azotada por una serie de fenómenos climáticos extremos, con incendios forestales, temperaturas superiores a 50°C, olas de calor y deshielos.

Carlos Montes https://www.latercera.com/que-pasa/noticia/el-planeta-se-derrite-eeuu-canada-italia-grecia-groenlandia-y-turquia-sufren-las-consecuencias-del-cambio-climatico-en-el-hemisferio-norte/KI44UNMVZ5FXBPNE5Q3PM2YA5M/ entrevista al Académico UTEM Luis Carrasco en la Tercera diario digital.

Altas temperaturas, olas de calor, deshielos, inundaciones, altas presiones, ausencia de vientos, incendios y sequías son algunos de los ingredientes que afectan actualmente al planeta. En invierno o verano, y en distintos continentes, el cambio climático está causando estragos.


En Chile, a pesar de estar en invierno, la estadística indica registros cercanos a 30°C, acompañado de olas de calor. Esto además de un importante déficit de lluvias de 50% en la zona central y 84% en la Región Metropolitana, considerando el invierno meteorológico. El actual invierno se posiciona como el más cálido y como el segundo más seco de la historia en el país, con solo 22,9 mm de agua caída.

En buena parte de Europa la situación es aún más compleja. Italia, Chipre, Grecia, Groenlandia y Turquía sufren la consecuencias del cambio climático en pleno verano. Las olas de calor han producido altas temperaturas en la región. “La temperatura en la superficie del suelo en Turquía y Chipre superó nuevamente los 50º Celsius”, indicó la Agencia Espacial Europea (ESA).

También se han visto seriamente afectados por incendios, los que han dejado decenas de fallecidos. Algunos granjeros en Turquía señalaron que “nunca habían visto nada igual”. Por su parte, Grecia es testigo de la peor ola de calor en 30 años. En Italia, Sicilia ha registrado 160 incendios en los últimos días, con más de 30.000 hectáreas quemadas. En Groenlandia una ola de calor provocó deshielos de aproximadamente 8.000 millones de toneladas (posee la segunda capa de hielo más grande del mundo después de la Antártica).

El mismo escenario se repite en EE.UU. El Servicio Meteorológico Nacional en Las Vegas emitió un aviso de riesgo de calor “muy alto”, para gran parte de California y Nevada, además el noroeste de Arizona y el suroeste de Utah. Esto considera ciudades como Sacramento, Bakersfield, Las Vegas, Palm Springs y Phoenix.

Martín Jacques, investigador del Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR)2 y académico del Departamento de Geofísica de la Universidad de Concepción, señala que las olas de calor son eventos meteorológicos extremos que corresponden o son consecuencia de patrones de circulación del aire característicos. En particular, se producen por una alta presión que genera una suerte de bloqueo de la circulación, un estancamiento del aire y eso inhibe la formación de nubes y genera entonces condiciones de muy alta radiación solar. “Y también de estabilidad atmosférica, lo que significa que generalmente tenemos zonas de descenso de aire, entonces el aire se comprime y se calienta también, además de la radiación solar. Estos factores, si son persistentes en el tiempo, pueden generar altas temperaturas y si tenemos altas temperaturas por varios días, sobre un cierto umbral, sobre un cierto valor crítico, entonces se clasifica ese evento como ola de calor”.

Esta es la situación que vemos ahora en el centro de Chile, donde hemos estado presenciando una ola de calor de invierno. “Las olas de calor de invierno presentan temperaturas máximas sobre esta temperatura crítica. Con valores cercanos a los 30 °C ya tenemos olas de calor de invierno, porque las olas de calor son relativas al momento en que suceden”, añade Jacques.

Raúl Cordero, climatólogo de la Universidad de Santiago, explica que lo sucedido en el hemisferio norte, “se debe a que se está calentando mucho más rápido que el del sur. Lo que estamos viendo en ese hemisferio es una ventana de tiempo y es lo que va a sucedernos a nosotros en el hemisferio sur, más pronto que tarde. La diferencia es que el hemisferio norte comenzó a calentarse antes que el sur y lo está haciendo más rápido”.

Luis Carrasco, académico de la Escuela de Prevención de Riesgos y Medio Ambiente de Universidad Tecnológica Metropolitana, explica que la temperatura de la Tierra ha aumentado más de 1ºC desde el período anterior a la Revolución Industrial y no deja de subir, según datos de la Organización Meteorológica Mundial (OMM). “Si se sigue emitiendo más dióxido de carbono, su concentración en la atmósfera alcanzará máximos históricos. Este gas es capaz de permanecer allí durante siglos, y el que está en los océanos aún más, ’perpetuando’ así el calentamiento global”.

La ola de calor es una condición atmosférica que se produce cuando las temperaturas alcanzan niveles extremos en determinadas épocas del año y se generan por una masa de aire caliente que llega desde otro continente. “Éstas serán cada vez más intensas y frecuentes conforme pasen los años. La comunidad científica asegura que el calor en todo el mundo está vinculado con actividades humanas como la deforestación de bosques y selvas, quema de combustibles fósiles y excesivo uso de fertilizantes. A medida que avanza el calentamiento, provoca cambios en el ambiente que a su vez pueden provocan otros cambios climáticos en donde se destaca la variabilidad climática, olas de calor y frío”, señala Carrasco.

¿Por qué el hemisferio norte se está calentando más rápido? “Por efecto de la Antártica y el Polo Norte. La Antártica no se está calentando tanto como el Polo Norte, lo que de alguna manera nos está protegiendo”, agrega Cordero.

En el caso de Grecia, por ejemplo, y zonas del Mediterráneo en Europa ahora, “lo que estamos presenciando son olas de calor de verano. Por lo tanto, este valor umbral sobre el cual tiene que estar la temperatura máxima por varios días persistentemente es mucho más alto y ahí las olas de calor que estamos presenciando sobrepasan los 40 °C”, explica el investigador del CR2.

Jacques considera que en el centro de Chile ahora y en el Mediterráneo, particularmente en Grecia, “lo que vemos es esta condición de bloqueo atmosférico producido por una alta presión. En el caso de Europa, esto se proyecta como un valor posiblemente récord de temperatura a nivel europeo. Así que, por supuesto las olas de calor son esperables cada verano, pero valores tan altos como los que estamos viendo en Grecia, son completamente extraordinarios”.


El académico de la Utem argumenta que el cambio climático es una de las responsables de estas olas de calor. “En términos científicos, una ola de calor se produce conforme las ondulaciones atmosféricas se vuelven más amplias y estacionarias. Las ondas pueden ser de aire frío o caliente, invaden regiones fuera de su latitud habitual. El resultado: intercambio entre masas de aire frío y caliente que dan lugar a las olas de calor. Pese a que éstas son un fenómeno que se produce de manera natural, los científicos observan que la frecuencia y la intensidad de las mismas no lo es tanto”.


El calentamiento global es una causa del cambio climático
En la primera y segunda década del siglo XXI, las olas de calor han sido más intensas y frecuentes que las observadas en las décadas de los 70, 80 y 90. De tal modo que el factor humano es relevante en el aumento global de las temperaturas. “El calentamiento global es la causa del cambio climático, con el aumento de la temperatura del planeta provocado por las emisiones a la atmósfera de gases de efecto invernadero derivadas de la actividad humana, se producen variaciones en el clima que de manera natural no se producirían; para mediados de siglo las temperaturas promedio de verano podrían ser hasta 4,5 grados más altas. Las olas de calor serían con toda seguridad más frecuentes, y más intensas”, establece Carrasco.

El hecho de que cada verano se vayan batiendo récords de temperatura de forma sucesiva o que prácticamente cada año suceda eso, nos está mostrando que hay una tendencia hacia valores promedio de la estación cada vez más altos, ya sea verano o invierno. “Eso entonces es una suerte de escenario de condición de fondo más cálida, que por lo tanto facilita la ocurrencia de eventos extremos. Hay que considerar que tenemos un escenario más cálido, por ejemplo, las temperaturas están siendo más cálidas en términos generales, entonces sobrepasar estos umbrales de temperatura para que se determine una ola de calor es más fácil y ese es el efecto del cambio climático, que está generando una condición de fondo más cálida”, señala Jacques.

Jacques agrega que hay que ver esto como una superposición de factores, uno lo puede ver como una muralla en la que hay ladrillos, uno sobre el otro. “Entonces, si tenemos una parte de la muralla construida con un verano cálido en Europa, por ejemplo, el de ahora, es más fácil añadir sobre esa parte de la muralla un par de ladrillos más, que serían las condiciones meteorológicas particulares que genera la ola de calor, ese es el efecto del cambio climático”.

La Tierra ya se ha calentado y enfriado en otras ocasiones de forma natural, “pero los ciclos siempre han sido más lentos, desarrollándose en millones de años, mientras que ahora y como consecuencia de la actividad humana, estos ciclos son rápidos y violentos, los que podrían traer impactos que en otras épocas superaron 200 años. Como consecuencia de esto, enfrentamos pérdida de biodiversidad, derretimiento de glaciares, fenómenos climáticos extremos, acidificación de océanos, cambios en los hábitats, entre otros”, agrega Carrasco.

El Acuerdo de París estableció como objetivos mantener el aumento de la temperatura media global a no más de 2 °C y tratar de no superar los 1,5 °C. Se entiende que el acuerdo se refiere a aumentos durante un largo período de tiempo en lugar de un solo año. “Por el momento, las proyecciones sugieren que incluso con las promesas recientes de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, el mundo está en camino de calentarse hasta en 3 °C”, sostiene Carrasco.

Y ¿esperamos que esto se siga viendo en el futuro? “Sí, efectivamente esperamos eso, porque el calentamiento global es consecuencia de un aumento sostenido de los gases de efecto invernadero en términos históricos, es decir los gases de efecto invernadero que se han emitido desde hace muchas décadas, entonces esperamos que ese efecto siga presente hacia el futuro. Eso no impide que eventualmente tengamos un verano relativamente frío en Europa o un invierno nuevamente más frío en Chile central, eso es parte de la variabilidad interanual, año a año que puede existir, y es esperable que haya nuevamente inviernos lluviosos en Santiago o más fríos. Pero, en general, la tendencia que esperamos, en términos más amplios en el tiempo es una tendencia sostenida al calentamiento y por lo tanto tener nuevos récords de temperatura de aquí al futuro”, analiza Jacques.

A medida que el clima se calienta, tendremos más meses por encima de 1,5 °C, “luego una secuencia de ellos, luego un año entero en promedio por encima de 1,5 y luego dos o tres años y luego prácticamente todos los años. Hay un riesgo significativo de convertir los sistemas naturales, que actualmente ayudan a mantener bajas las temperaturas, en fuentes masivas de carbono que nos pondrían en un “camino irreversible” hacia un mundo que está 4 o 5 grados más cálido que antes de la Revolución Industrial, donde el planeta ya no sería el mismo”, señala el docente de la Escuela de Prevención de Riesgos y Medio Ambiente de la UTEM.

Nota: Las fotos son referenciales, el articulo pertenece a La Tercera digital / Carlos Montes

 

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Los Héroes también pueden morir en un incendio

Ing. Luis Carrasco Garrido
Académico Dpto. de Prevención de Riesgo y Medio Ambiente UTEM
Experto en Gestión del Riesgo y Educación luis.carrasco@utem.cl @carrascoluis

En un reciente incendio en el sur del país,  mientras el fuego avanzaba vertiginosamente por el inmueble, se escuchaban los gritos a viva voz preguntando si había  personas al interior.

Vecinos confirmaron la presencia de un adulto mayor, ante lo cual las personas rompieron los vidrios utilizando elementos que había en el lugar, para acto seguido, ingresar al inmueble envuelto en llamas, logrando encontrar al adulto mayor, siendo rescatado con vida y sacado al exterior en forma inmediata y entregado al Samu que en ese instante arribaba al lugar.

Sin lugar a dudas un acto loable, pero también de mucho riesgo; pues este tipo de acciones si bien son destacables requieren de conocimientos básicos de cómo se mueve el fuego y cuáles son sus particularidades.

Una de las principales características que hay que tener en cuenta en un incendio es que el fuego fuera de control se mueve y avanza de forma geométrica y violenta, eso significa que un incendio a llama viva en pocos minutos puede tener un avance insospechado con un aumento de la temperatura igualmente violento. Una persona no entrenada y sin elementos de protección adecuada prácticamente a los 60 o 65 grados Celsius podría estar irremediablemente muerta, simplemente porque recibirá quemaduras en todo su cuerpo, su ropa se quemara y entrará en llamas, y finalmente no podrá respirar aire caliente por cuanto esto desbaratara sus pulmones.

Las películas en general no aportan al entendimiento y conocer cómo se desarrolla el fuego. Cuando un incendio se lleva al cine los actores siempre triunfan, cruzan entre llamas que no son iguales a las de un incendio real. Lo más probable es que en un incendio su visibilidad sea cero, le lloren los ojos y no pare de toser, su sentido de orientación y forma de reconocer, no será por el sentido de la vista sino por el tacto.

Recordemos  que todas las personas  necesitamos  oxígeno para vivir, para pensar y para movernos y en un incendio,  es posible que el oxígeno baje a tal punto,  que sufra una asfixia y si en el ambiente hay monóxido de carbono usted pueda intoxicarse, lo que no le permitirá actuar con normalidad a tal punto que no podrá pensar ni moverse, quedará bloqueado.

Finalmente, no está de más decir que a rescatar se aprende y se ensaya, no es factor del azar, así que aun cuando sea un acto heroico producto de las circunstancias, esta decisión debe considerar la seguridad del rescatador, del rescatado y su entorno, de otra forma quien salva pasa a ser un “temerario”  que puede ser parte de un problema mayor, lo que indica que un héroe también puede morir en un incendio.

Nota: La foto utilizada es solo referencial  / Este artículo fue publicado de forma parcial o total en Diario papel y digital El Heraldo Austral https://www.eha.cl/noticia/opinion/opinion-los-heroes-tambien-pueden-morir-en-un-incendio-11545  biobiochile diario digital https://www.biobiochile.cl/noticias/opinion/tu-voz/2021/07/26/los-heroes-tambien-pueden-morir-en-un-incendio.shtml

 

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¿Qué es el Carnet Verde? es un documento donde se acredita que la persona está inoculada, es decir, recibió las dos dosis de la vacuna contra el coronavirus y, por lo tanto, en caso de contraer el virus su impacto debería ser menor,  le va a permitir desplazarse de una comuna en Cuarentena o Transición y, por tanto, también los fines de semana y festivos, así como realizar viajes interregionales entre comunas que se encuentren en fase 2 o superior.

Para muchos países, volver a la normalidad pasa por la introducción de un certificado sanitario que pruebe que se ha recibido la vacuna o se ha dado negativo en un test las últimas 72 horas. Pero la conveniencia de este tipo de certificado depende de la situación epidemiológica, por lo que no es aplicable en todos los países. Dinamarca es un caso que establece este pase para incentivar la vacunación que alcanza aproximadamente el 20%, y es para mayores libertades como compartir en espacios cerrados, espectáculos, etc. La diferencia está en que Dinamarca testea con PCR a más de medio millón de personas diariamente equivalente al 8% de su población, lo que también permite a quien no se ha vacunado optar a ciertas libertades, y lo que es más importante hay una trazabilidad fuerte (con esto, se sabe quién se contaminó, dónde está y dónde se encuentran sus contactos). Israel en cambio, se convirtió en un laboratorio del mundo real para la eficacia de la vacuna, ahora se está convirtiendo en un ensayo para una sociedad pos confinamientos y pos vacunación. El Green Pass es su boleto de entrada para cenar en el interior de los restaurantes, hospedarse en hoteles y asistir con miles de otras personas a eventos culturales, deportivos y religiosos, ya sea al aire libre o en interiores. En cambio en Chile, que se ha especializado en hacer malas copias o llegar a destiempo, nos presenta una realidad desconcertante; presenta el carnet de movilidad o carnet verde con un escenario con aumento evidente de contaminados y de muertos, esto se produce en una realidad con toque de queda, confinamiento absoluto, gran cantidad de comunas en fase 1 y 2, donde el control sanitario y policial no se evidencia, en donde la mitad de la población vacunada, no muestra como la balanza se inclina hacia la normalidad o el control. Si bien, pareciera que el carnet verde es una buena idea para momentos de control del virus, que no es el caso de Chile, la vacuna no tiene una vinculación al menos evidente sobre transmisión del virus, sino más bien tiende a aminorar los efectos en aquellos que la contraen; de la misma forma es de temer que la mitad de la población no esté vacunada, y que los jóvenes no estén interesados en vacunarse. Frente a esa realidad pareciera que el carnet verde es una medida cosmética, porque aun en el país no está resuelta la trazabilidad, el aumento de PCR, y una cultura de autoprotección con el uso de mascarilla, distancia social, lavado de manos, y ventilación natural, para convivir adecuadamente con el COVID-19. Frente a eso el Carnet Verde más bien parece un carnet que rápidamente se destiñe perdiendo su color.

Nota: Este articulo ha sido publicado de forma parcial o total por Bio-Bio.cl el 28.05.21 https://www.biobiochile.cl/noticias/opinion/tu-voz/2021/05/28/la-creacion-de-un-carnet-verde-que-rapidamente-se-destine.shtml y el periodico el rancaguino 30.05.21 https://www.elrancaguino.cl/2021/05/30/la-creacion-de-un-carnet-verde-que-rapidamente-se-destine/

 

Ing. Luis Carrasco Garrido Académico Dpto. de Prevención de Riesgo y Medio Ambiente UTEM Experto en Gestión del Riesgo y Educación luis.carrasco@utem.cl @carrascoluis

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Control de Marejadas y Defensas Fluviales.
Una ventaja de este sistema es la versatilidad para retirarlo si fuera necesario, ya que genera el mínimo impacto en el fondo marino. Esta solución también ofrece importantes reducciones de costo y de huella de carbono.
La acción de las olas ha sido un problema permanente para las zonas costeras ya que pueden erosionar Las playas, o colocar arena donde no es necesario. Es por ello que se está empleando el uso de geosintéticos, ¿Qué son?

Luis Carrasco, académico de UTEM y especialista en gestión del riesgo, explica que los geosintéticos son materiales, principalmente fabricados con productos derivados del petróleo, originalmente usados en aplicaciones de ingeniería geotecnia, utilizados para mejorar. cambiar o mantener las características del suelo con el que interactúan los diques construidos con geotextil, un material sintético resistente que tiene menos impacto en el ecosistema natural,. tienen como objetivo frenar la regresión de las playas. Estamos hablando de telas. tubos, rejas. de cubos, contenedores. etc. Estos elementos de plástico pueden ser rellenados con otro material para conseguir el objetivo", explica el experto de UTEM.

Según señala Luis Carrasco, las funcionalidades que tienen los geosintéticos son múltiple: drenar, hacer un dique, desviar el agua, evitar que se mezclen aguas u otros productos, etc.

'Obra ventaja de este sistema es la versatilidad para retirarlo si es que fuera necesario, ya que genera el mínimo impacto en el fondo marino, lo que no se puede hacer con los espigones sumergidos de rocas u hormigón. Esta solución también ofrece importantes reducciones de costo y de huella de carbono", recalca.

En el caso de los sectores costeros, que se han visto afectados por las marejadas, el docente de UTEM afirma que los contenedores pueden ser colocados lejos de la playa donde la acción de las olas está causando daño. "Las unidades geosintéticas interrumpen el paso del agua y de las olas de gran amaño tamaño; La localización de las estructuras puede ser calculada por Los ingenieros, favoreciendo la recuperación de la playa".

Asimismo, utilizando geosintéticos para cambiar Los patrones de la olas, se reducen Los daños a Las propiedades, o la renovación de la costa y de las playas

¿Dónde se utilizan?

Los geosintéticos han sido aplicados durante décadas en Chile en diversas aplicaciones y funciones. "La contención de líquidos por medio de geomembranas ha sido una de las principales aplicaciones, en particular, en grandes proyectos mineros en Perú y Chile. Otros geosintéticos como qeonets, geotextiles y geogríds han complementado dichas aplicaciones en numerosos proyectos en funciones de protección de geomembranas. drenes. filtros y refuerzos. También han sido utilizados en obras civiles., obras viales, tranques de riego y generación eléctrica, comenta Carrasco.

Los geosintéticos, orientados a aplicaciones de mayor relevancia en contención de líquidos, en presas, embalses y depósitos de relaves, es normal verlos en la minería y en puertos de descarga, de tal forma que se sigue avanzando en nuevas utilizaciones, puntualiza el experto en riesgos.

 

Recuadro
- Los geosintéticos, orientados a aplicaciones de mayor relevancia en contención de líquidos, en presas, embalses y depósitos de relaves, es normal velos en la minería y en puertos de descarga, de tal forma que se sigue avanzando en nuevas utilizaciones.

- SEIS PRINCIPALES FUNCIONES DE LOS GEOSINTETICOS:

1. Separación Evita que los diferentes tipos de suelos se mezclen para mantener la integridad de cada material al tiempo que permite el libre paso de líquidos y gases.

2. Drenaje: Recoge y transmite, permite que los líquidos y los gases fluyan a través de la superficie del material. Facilita La escorrentía de las aguas superficiales.

3. Filtración: Esta función es a menudo asociada con la separación. Permite aislar un material de otro, Las aplicaciones más comunes son en los rellenos sanitarios, Lagunas u otros estanques cuando es necesario evitar la contaminación del área circundante.

4. Refuerzos: Proporciona una fuerza adicional a los suelos y agregados. Se utiliza para fortalecer fuertes pendientes y suelos débiles y variables.

5. Protección: Evita daños considerables ocasionados por materiales adyacentes Usualmente, se emplea corno barrera para evitar contaminación.

6. Diques o frenos: Evita que el oleaje o los líquidos o mezclas impacten a la velocidad o fuerza natural.
Este artículo fue publicado el 31 de marzo de 2021 en la Tercera Ediciones Especiales Control de Marejadas y Defensas Fluviales, pag 22, realizado por Romina Jaramillo di Lenardo, entrevista al Ing. Luis Carrasco Garrido Especialista en Gestión del Riesgo y Emergencias

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La formación de profesionales de la emergencia responde al“Marco de Sendai en temas de Gestión del Riesgo”[i]. Para tal efecto se crean escenarios que ponen en juego múltiples variables de emergencia, con carácter de catástrofe, que después confluyen en una gran mega emergencia, Ejemplo: Un terremoto, con corte de servicios básicos (agua, luz, gas, comunicaciones, etc.),  a eso se agrega un incendio complejo. Este tipo de escenario pone a prueba a los actores en: conocimiento, competencias, aplicación, gestión, planificación, creación de soluciones, trabajo en equipo, y otras virtudes que debe poseer para el trabajo bajo presión y con múltiples variables catastróficas en escenarios de crisis.

Cuando hablamos de variables catastróficas, nos estamos refiriendo a acontecimientos que, en un contexto de vulnerabilidad, puede actuar como desencadenante de un evento mayor. (Instituto de Estudios sobre Desarrollo y Cooperación Internacional, 2020).Todo eso que alguna vez habíamos creado de forma ficticia, lo vimos en vivo y en directo,el sábado 30 de enero de 2021, en un escenario de emergencia sanitaria debido al Covid-19,donde se agregó el desarrollo de un incendio estructural de una complejidad sin precedentes. Se quemaba  el Hospital San Borja-Arriarán.

Que vimos, una puesta en escena perfecta, un ejercicio de alta complejidad, un amplio dispositivo de Policía, Ejército, Bomberos y Personal de Salud;se estableció un puesto de comando, donde se dirigieron las acciones para llegar a los pisos superiores del hospital donde se desarrollaba el incendio en un espacio de afección de 10.000 m², en el intertanto se evacuaban a los pacientes desde el interior hacia un estacionamiento o una zona segura a la intemperie fuera del hospital, con las medidas sanitarias adecuadas debido a la pandemia del corona-virus, para coordinar su posterior desplazamiento a otras clínicas y hospitales según la complejidad del paciente.

El cuadro era totalmente complejo: los pacientes con corona-virus fueron sacados del ventilador mecánico, desconectando las bombas de infusión y monitores, luego pasados a una camilla especial con monitor y ventilación portátil, para luego ser trasladados en ambulancias más complejas.

El evento fue transmitido en vivo para todo el mundo y cubierto por la prensa internacional, si bien teníamos un incendio complejo, esto coincidía con un momento de rebrote de la pandemia de COVID-19 en Chile, donde gran parte del sistema sanitario estaba trabajando a su máxima capacidad, y el Hospital San Borja era parte de este sistema.

Bomberos de Santiago determinó inicialmente que los Voluntarios junto a personal de salud del centro asistencial iniciarán la evacuación de los 350 pacientes del hospital; de forma transitoria, los evacuados fueron ubicados en unos toldos de las Compañías presentes en la emergencia y también en un hospital de campaña que hizo llegar la Municipalidad de Pudahuel, en cuyo despliegue colaboraban muchas personas pertenecientes a múltiples instituciones. En un colegio cercano personal de salud entregaba información de los pacientes y contención a los familiares.

En la evaluación final no contar con pérdida de vidas, no tener heridos, haber salvado los pacientes graves, haber coordinado a muchas instituciones de diferente naturaleza para lograr los objetivos propuestos, haber controlado un incendio complejo con mucha carga combustible, incendio que se presentaba con un avance violento, con problemas de accesibilidad y con posibilidad de propagación a otras estructuras hospitalarias. Se transforma en un ejercicio de estudio, de laboratorio necesario para la formación de los profesionales que trabajan o se enfrentan a emergencias.

En resumen,una emergencia que muestra un desarrollo favorable por los resultados, por la administración y la gestión en el  incidente, donde destaca el trabajo de bomberos, del personal de salud y todas las instituciones que participaron de este evento que pudo haber sido catastrófico.

Esta emergencia, hoy puede ser utilizada como ejemplo de:“cómo se debe articular una respuesta adecuada de control de una emergencia con múltiples variables catastróficas”,donde las variables, no confluyeron en una emergencia mayor, debido al manejo adecuado de la misma; que sin lugar a dudas, si no hubiese sido así, habría desarticulado o impactado fuertemente nuestra estructura sanitaria, de seguridad y de orden social.

Este es un buen ejemplo que debemos destacar y presentar como “un caso de estudio para la formación de nuestros nuevos ingenieros y todo aquel personal que trabaja en el tema de gestión del riesgo o debe enfrentar escenarios de crisis”.

Ing. Luis Carrasco Garrido Académico Dpto. de Prevención de Riesgo y Medio Ambiente UTEM Experto en Gestión del Riesgo y Educación luis.carrasco@utem.cl @carrascoluis

Nota: Este articulo ha sido publicado totalmente o parcialmente en:


[i]El Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres 2015-2030 (Marco de Sendai) fue el primer acuerdo principal de la agenda de desarrollo posterior a 2015 y ofrece a los Estados miembros una serie de acciones concretas que se pueden tomar para proteger los beneficios del desarrollo contra el riesgo de desastres.

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Más casas, más deforestación significa exacerbar el momento que estamos viviendo, aumentan las posibilidades de que la vegetación se seque, aumenta el riesgo de incendio. Mayor cantidad de asentamientos habitacionales y una mayor cantidad proyectos inmobiliarios que no consideran la variable de riesgo de incendio, establece un escenario catastrófico.

La posibilidad de generar un incendio forestal en temporada baja o alta con resultados destructivos, indica que el cambio climático facilita el riesgo de incendios, y las posibilidades de que el fuego sea inmanejable son reales; hoy los incendios son más intensos y requieren de una respuesta más rápida, oportuna y una cantidad de recursos nunca antes visto.

Sabemos que nuestra realidad es “un rompe cabezas” donde confluyen muchos elementos: cambio climático, leyes que regulen el uso del combustible (basurales, pastos, especies arbóreas, etc.), ordenamiento territorial donde las variables de riesgo estén presente,  comportamiento humano (cambio de cultura frente al manejo de fuego, quema de basura, quemas controladas, manejo de actividades con fuego, temperatura o chispas, y otras.), comportamiento preventivo (la limpieza, el orden, las acciones que hacen posible el control del fuego ex ante). Esta adaptación requiere de un trabajo profundo y decidido, no podemos continuar con medidas cosméticas y con medidas reactivas que son visibles, pero son, ex post facto (después del hecho).

En Chile el 99,9 % de los incendios, son incendios provocados por el hombre, de tal manera que el origen del fuego va desde aquellas acciones normales o usuales de uso y manejo del fuego que históricamente se han realizado, y que hoy podrían provocar un gran incendio: fogatas, quemas de basura, soldaduras, usos de esmeril, y otras, que caen en el accionar descuidado, por no tomar todas las medidas preventivas para evitar el incendio, hasta llegar a aquellas que poseen una intencionalidad culposa por variadas razones.

En ese panorama cualquier manejo o uso del fuego es riesgo y tiene posibilidades concretas para iniciar un incendio con insospechados alcances.

El bosque por si solo es origen de ignición, es lugar propicio para el fuego; el gran aumento de combustible producto de episodios de lluvia, pone un escenario propicio para los incendios, la construcción de casas y otros edificios en espacios de interfaz donde se une el bosque con la ciudad hace factible cualquier combinación de desarrollo y propagación del fuego: “que comienza en las casas y termina en el bosque o comienza en el bosque y termina en las casas”.

Los incendios cerca de la llamada interfaz urbano-forestal, así como los desastres en bosques más alejados, el cambio climático ha sido el responsable de aumentar los riesgos de forma significativa.

Si a eso, agregamos la indiferencia que muestra la población, a temas tan críticos como son el cambio climático y los incendios forestales, y a pesar de ello, continúa con el uso y manejo del fuego indiscriminado, sin ninguna medida de prevención y seguridad.

El resultado puede ser totalmente catastrófico; la respuesta:- nunca pensé que sucedería o no lo quise hacer, o nunca me había sucedido antes- no son respuestas contundentes, ni responsables, para gente que se le ha advertido de muchas formas que no es momento de manipular el fuego, pudiendo evitarlo.

Este articulo ha sido publicado totalmente o parcialmente en: https://www.soychile.cl/Valparaiso/Sociedad/2021/01/24/690867/Especialista-en-emergencias-sobre-incendios-forestales-El-999-son-provocados-por-seres-humanos.aspx

La Estrella de Quillota 22.01.21

Ing. Luis Carrasco Garrido Académico Dpto. de Prevención de Riesgo y Medio Ambiente UTEM Experto en Gestión del Riesgo y Educación luis.carrasco@utem.cl @carrascoluis

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En el año 2000; si, hace veinte años, los fuegos artificiales eran comercializados sin límite a personas naturales y también a niños, lo que finalmente nos puso la lista de los países sin regulación en la materia en América, “con cifras impresentables de niños quemados a causa de fuegos de artificio”.

Esta batalla que se dio desde diferentes instituciones Bomberos, Coaniquem, por nombrar algunas, tenían claro, que: “los fuegos artificiales son ingobernables” y de ahí, gran parte del riesgo y peligro que podían ocasionar, un artefacto peligroso que se lanza y no sabemos dónde puede caer.

La estadística demostraba que quemaban al operador y a aquellos que sin tener “arte ni parte” miraban la operación, porque también podían ser impactados por “la bengala” o un artefacto similar, también se ocasionaban incendios en casas y pastizales aledaños.

En mayo de 2000, se logró la promulgación de la Ley 19.680 del ministerio de Defensa Nacional, que prohíbe el uso de fuegos artificiales, la venta al público de ellos y regula la realización de espectáculos pirotécnicos masivos.

Esto permitió que la estadística de quemados por esa razón, bajara visiblemente, así como bajaron los incendios a consecuencia de los mismos fuegos de artificio.

Los espectáculos pirotécnicos realizados por profesionales también aumentaron sus exigencias, pero siguiendo la misma máxima que “los fuegos artificiales son ingobernables”, convivieron con el riesgo asociado.

Hoy nos vemos en un escenario donde la venta clandestina ha aumentado, donde es común escuchar en las noches o ver fuegos artificiales en poblaciones, vía pública, actos familiares, en actos mayores o menores sin regulación aparente; “hoy es normal ver el uso de fuegos artificiales”.

¿Dónde se compran? ¿Quién los trae? ¿Quién los comercializa? Seguramente no podremos contestar con certeza a estas preguntas, pero si podemos establecer con certeza una realidad: No habría comercio, si no hubieran interesados. Quienes los comercializan son adultos, y los mayores perjudicados siempre son terceros, son niños, que observan o manipulan un artefacto que es ingobernable.

Hace 20 años nos sentíamos orgullosos, porque ingresábamos a la lista de países serios en esta materia; hoy estamos en la lista de los países que teniendo una ley esta no es efectiva.

“Nuevamente tendremos que apelar al autocuidado, el mismo que no ha funcionado del todo bien con el COVID-19. NO COMPRE NI OPERE FUEGOS ARTIFICIALES, además de ser un delito, puede quemarse el operador, aquel que mira, un niño, puede quemarse lo más preciado para nosotros; recuerde los fuegos artificiales son ingobernables”.

https://elreporterodeiquique.com/los-fuegos-artificiales-son-ingobernables/

 

Ing. Luis Carrasco Garrido Académico Dpto. de Prevención de Riesgo y Medio Ambiente UTEM Experto en Gestión del Riesgo y Educación  luis.carrasco@utem.cl @carrascoluis

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Para las fiestas, y en este caso las “fiestas Patrias”, la gente en general, tiende a celebrar con acciones que nunca ha realizado o normalmente no hace o no tiene experticia, no planifica la celebración y toma riesgos innecesarios que pueden terminar en un accidente.

En estas fechas hay una gran tendencia a comer en exceso, o mezclar alimentos incompatibles, a tal punto, de provocar problemas estomacales o gastrointestinales. Al consumir productos que han perdido su cadena frío y que muchas veces están en descomposición, nos llevan a cuadros agudos de intoxicación.

Cuando a temas de comer se refiere, por ejemplo, conversar, beber, con trozos muy grandes de carne en la boca,  no masticar y tragar, es probable que nos encontremos con un episodio de atragantamiento repentino, lo que produce generalmente una  obstrucción accidental de las vías respiratorias, que puede llegar a provocar la asfixia del sujeto afectado, ante eso, muchas veces la gente no sabe  aplicar la maniobra de Heimlich, como solución práctica.

El consumo de licor, de bebidas alcohólicas en exceso, llevan a realizar acciones temerarias, poco precisas, torpes que pueden provocar  caídas del mismo nivel, a diferente nivel, manejo imperfecto del fuego, de cuchillos, martillos, serruchos, herramientas en general, cierre de puertas, caminar por la calle, etc. Conducir luego de beber alcohol, hace que el conductor además de temerario, tenga reacciones lentas, lo que puede provocar choques, atropellos, una tragedia. Dormir ebrio (en niveles severos, en estado Blackout) puede significar ahogarse con su propio vómito o tener cero reacción, frente a un incendio, terremoto, o una emergencia donde se requiere de su participación.

Cortar la carne, no es juego. Se requieren cuchillos adecuados, colocación de las manos en posición defensiva, para corte de riesgo, o simplemente el uso de un guante de seguridad fabricado de malla metálica. Para evitarnos eso, pídale a la carnicería o centro carnicero el corte que usted desea y no experimente una acción que puede tener consecuencias graves.

El hacer fuego en una parrilla es un arte, pero, ¡cuidado!, el uso de “acelerantes” para mejorar la llama, gasolina, aceite, querosene, cera, petróleo, pueden tener la reacción de una explosión; un flamazo, que puede quemar al parrillero, su entorno, la ropa, el cortinaje, incluso todo el combustible que rodee la parrilla (papel, carbón, bidón de acelerante). Así mismo el uso del secador de pelo o ventilador crea un lanza llama inesperado, por aumento del oxígeno en la combustión; el contacto del fuego con la ropa sintética de los observadores que muchas veces son niños, también puede ser un episodio terrorífico.

El uso de parrillas de gas, sin verificar mangueras, abrazaderas, fugas,  o parrillas eléctricas que no tienen llama, al dejarlas conectadas propician quemaduras en inexpertos.

Conexiones eléctricas artesanales, para alumbrar patios o extensiones, fuera de la construcción madre, conexiones con cables “vivos” (sin protección y con energía), pueden provocar una electrocución; recalentamiento de línea, por un alto consumo, puede provocar un incendio, el uso de focos potentes de iluminación en contacto con guirnaldas y cortinajes también pueden producir incendios.

La colocación de banderas, así como el arreglo de la casa en acciones temerarias en altura, sin tener escalas adecuadas, puede significar una caída grave, teniendo en cuenta que 1.80 m. es una medida mínima de atención en lo laboral, colocar la bandera en mástiles inadecuados, o lugares de cierta complejidad como lo son balcones o techos, puede significar, caídas, golpes, cortes, de gravedad.

Y como si fuera poco, ahora se agrega el COVID-19, guarde la distancia física a los menos dos metros de distancia entre invitado e invitado, proteja a la gente de tercera edad o que tengan preexistencias que hacen su salud más frágil (hipertensión, problemas cardíacos, respiratorios, etc.) Use mascarillas y que todos los invitados usen mascarillas, prepare un mesa con distancia física, haga caso a la recomendación que establece un máximo de personas que se pueden reunir; conserve su vaso, sus utensilios no mezcle elementos, cada cual con su servicio, plato, vaso. Las ensaladas en el plato nadie sacando ensalada y carne con el servicio que ha llevado a su boca. Cada dos horas un lavado de manos, no lleve sus manos a la cara, cuidado con los estornudos o conversaciones sin guardar las medidas de seguridad, limpie baños después de cada uso,  “recuerde a mayor exposición mayor riesgo de contagio”.

En estos días planifique su celebración y evite accidentes, que puedan “aguar” su celebración de Fiestas Patrias y no le de tregua al COVID-19.

 

Ing. Luis Carrasco Garrido Académico Dpto. de Prevención de Riesgo y Medio Ambiente UTEM Experto en Gestión del Riesgo y Educación

 

 

 

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